Galletas de Maní y Leche de Arroz Sin Gluten

Ingredientes

Masa para galletas

200 gramos (7.05 onzas) de cacahuates tostados

70 mililitros (0.3 tazas) de leche de arroz

1 cucharadita de polvo de hornear

Una pizca de sal rosa

Stevia (o cualquier endulzante) al gusto

Equipo

Molinillo de café o procesador de alimentos
Ideal para convertir los cacahuetes en harina. Un procesador de alimentos también hará el trabajo.
Bowl grande
Para mezclar todos los ingredientes. Es importante usar un bowl amplio para facilitar la mezcla homogénea.
Bandeja para hornear
Asegúrate de forrarla con papel de horno para evitar que las galletas se peguen.
Papel de horno
Imprescindible para que tus galletas no se peguen y queden perfectas.
Rejilla de enfriamiento
Esencial para que las galletas se enfríen y tomen la textura adecuada.

Instrucciones

Step 1

Precalienta tu horno a 180°C (356°F).

Step 2

Muele los cacahuates tostados en un molinillo de café o batidora hasta que alcancen una consistencia similar a la harina. Un procesador de alimentos también puede servir bien para esta tarea.

Step 3

En un tazón grande, combina los cacahuates molidos, la stevia, la sal rosa y el polvo de hornear. Mezcla bien. Asegúrate de que los ingredientes secos estén bien integrados para una distribución uniforme del sabor.

Step 4

Añade gradualmente la leche de arroz a la mezcla seca, revolviendo a medida que vas agregando. Amasa la masa hasta que se una. Puedes agregar nueces, frutas secas o gotas de chocolate en esta etapa para darle más sabor y textura.

Step 5

Con las manos mojadas, forma bolas pequeñas de masa y colócalas en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino. Aplana suavemente cada bola.

Step 6

Utiliza un tenedor mojado para crear muescas o patrones en la parte superior de cada galleta. Esto también ayuda a que las galletas se horneen de manera más uniforme.

Step 7

Hornea en el horno precalentado hasta que las galletas estén doradas, unos 10-15 minutos. El tiempo de horneado puede variar, así que mantén un ojo en ellas para evitar que se horneen en exceso.

Step 8

Deja que las galletas se enfríen en una rejilla antes de servir. El enfriamiento ayuda a que las galletas se endurezcan y alcancen la textura perfecta.

Porciones

Para disfrutar al máximo estas deliciosas **galletas de maní** y **leche de arroz sin gluten**, te damos algunas sugerencias:

🌟 **Sírvelas con un vaso de leche vegetal** como avena, almendras o soja. La combinación es irresistible y perfecta para un snack de media tarde.

🌞 **Acompáñalas con una taza de café o té caliente**. Esta opción es excelente para los amantes de las bebidas calientes, realzando el sabor de las galletas.

🥜 **Añade un toque especial con mantequilla de maní**. Si eres un fanático del maní, un poco de mantequilla de maní untada encima hará una explosión de sabor.

🌈 **Personaliza tus galletas** añadiendo frutas secas, chips de chocolate o frutos secos a la masa. ¡Las posibilidades son infinitas!

Variaciones

Versiones Sin Gluten:

🌾 Para una versión 100% libre de gluten, asegúrate de que todos los ingredientes, especialmente el polvo de hornear, no contengan trazas de gluten.

Variaciones Veganas:

🌱 Si quieres que tus galletas sean completamente veganas, utiliza un sustituto del polvo de hornear que no contenga productos de origen animal. La mayoría son veganos, pero siempre es bueno verificar.

Faq

¿Cómo sé si las galletas están listas?
Las galletas estarán listas cuando estén doradas por encima. También, si las presionas ligeramente y se sienten firmes, es una buena señal.
¿Puedo usar otra leche vegetal en lugar de leche de arroz?
¡Sí! Puedes usar almendra, avena o cualquier otra leche vegetal de tu preferencia.
¿Qué hago si la masa está muy seca?
Agrega un poco más de leche vegetal, cucharada por cucharada, hasta que la masa se pueda manejar bien.
¿Cómo logro que las galletas sean más crujientes?
Extiende las galletas más delgadas al formarlas y verifica que el horneado sea el suficiente para dorarlas bien.
¿Puedo congelar estas galletas?
Sí, puedes congelarlas una vez estén completamente frías. Asegúrate de almacenarlas en un recipiente hermético.
¿Cuál es la mejor manera de almacenar las galletas?
Guárdalas en un recipiente hermético a temperatura ambiente para que se mantengan frescas por más tiempo.